lunes, 23 de marzo de 2015

De antaño


Hurgando en el baúl de los escritos,me encontré esto de hace algún tiempo.








Usted escribe, se resiente, lo detesta, lo recuerda, lo extraña más, lo quiere de nuevo, se detesta por quererlo luego de tanto tiempo, luego de que le demostró que solo era un juego. Usted sigue sonriendo, sigue recordándolo con cariño, sigue sonriendo por cada memoria, por cada lugar, sigue sonriendo mientras lo imagina con su gran sonrisa y sus bonitos y expresivos ojos cafés. Usted sencillamente sigue, a la expectativa, no esperando volver a estar con él, no esperando provocarle sonrisas, no esperando besarlo de nuevo, sino esperando que dentro de un tiempo se encuentren en cualquier lugar, en medio de la espesa noche o en la estruendosa luz de la mañana acalorada de algún Abril para mirarlo a esos, sus ojos, ya no con miedo, ya no con tristeza infinita, sino con dulzura, con agradecimiento, y acompañando tal mirada con una inmensa sonrisa, ésa que ocasiona la frescura del ayer.




-ANGIE CAROLINA ERASO JARAMILLO.

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