Querido:
Han pasado exactamente dos meses desde aquella noche catastrófica en donde sacamos lo peor de ambos,han pasado un par de eternos e hirientes meses,me abrumo y me la paso intentando comprender tu postura manteniendo la mía.
Quisiera mirarte a los ojos como antes,buscarte los labios para besarte y llenarme el alma recostada en tu pecho,me encantaría amarte tanto como antes,correr a tus brazos y escribir versos que concluyan en ti.
Cuesta mucho olvidarte,ni siquiera sé si algún día vaya a lograrlo,necesito cerrar el ciclo,dejar de sentirme culpable y liberarme de todas y cada una de las cadenas que me atan a tu embriagante espectro.
Cuando logre cambiar ésta página de amor,jazz,literatura,alcohol y magia, TE ESCRIBO.
Hoy solamente me provoca desviar el pensamiento y tomar una copa de vino caliente. No tengo muchas ganas de pensar en el cómo resignarme o dejar de llevar el tatuaje mental que eres,porque estoy cansada de buscarle inicio al círculo. Mientras bebo el vino,miro la pared blanca suponiendo que es lo que busco construir pero con facilidad me aburro, porque de nada sirven los muros, NO HACE FALTA QUE ME DIVIDAN DE NUEVO, no más líneas o construcciones que partan en dos de nuevo éste cachito que oso llamar "vida".
Cuando pueda un día abrir los ojos sin ver los tuyos en mi mente,sentarme en la hierba sin pensar en tu presencia,leer a Barba Jacob sin escuchar tu voz, entonces y sólo en ese preciso punto, TE ESCRIBO.
-ANGIE CAROLINA ERASO JARAMILLO.
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