¡Advertencia! ⚠

Ya le han advertido en algunos escritos,que no se enamore de una mujer que lee o escribe.
Quiero recordarle las razones por las que enamorarse de una mujer así, resulta completamente peligroso y contraproducente.


Cuando la descubra entre el espesor de la noche o en algún parque vacío,cuando la vea y decida acercarse mientras ella ojea los árboles,busca formas a las nubes o reposa sobre la hierba, asegúrese de saber lo que hace,desde ese momento las alarmas se encienden y usted como todo macho asume sencilla la batalla y se visualiza ganador. Antes de que usted siquiera logre tomar valor para acercársele,ella se irá,en caso contrario,si usted fue ágil y lo impulsó la intriga, escupió un "Hola" y sonrió,prepárese para una aventura completamente diferente.
Si ella realmente es una mujer interesante y usted le atrae con su sonrisa y el aroma que emite,entonces recibirá una sonrisa como respuesta,quizá charlarán un poco,intercambiarán números y ella se irá caminando despacio a casa.


Cuando siga usted su camino y vaya pateando piedritas o en el taxi sonriendo e iluminando su paso,entenderá que no hay vuelta de hoja.


Le pido que piense muy bien si está dispuesto a conocer la vida desde una perspectiva más amplia y tal vez un poco ñoña (para los superfluos). Si es demasiado valiente y la sensación de plenitud que posee lo enceguece,entonces no le importará seguir.
No se lo aconsejo,pero los riesgos son deliciosos.


Pasarán las horas y la noche lo abrazará fuerte y con soniditos precisos,habrá de recordar el aroma de esa chica que aunque seguramente no es la más llamativa o la más hermosa,lo tomó de un punto vital a otro completamente distinto, recordará cada parte y cada gesto,cada palabra que hacía bailar a su cabeza por tanta cordura y perdición juntas.


Si mantienen el contacto, si los dos se enganchan,si los días pasan y sus almas se juntan,salen volando y parecen conocerse,entonces ahora sí,ya estará usted inmerso en un caldo universal y primigenio de perdición


Pero le repito:
No se enamore de una mujer que lee y escribe,si no cuenta con la valentía suficiente de pronunciar palabras que aunque crudas,seduzcan y en casos extremos,enamoren. No intente parecer poético arrojando rimas sin sentido o filosofías de medio pelo,tenga en cuenta que ella ha viajado mil veces y ha vuelto. No le mienta,no crea que la tiene entre sus manos porque una mujer así no es de nadie más que del viento. No se enamore si lo mejor que puede hacer es regalarle chocolates o peor aún,un peluche. Permítale ser ella,déjela sonreír,cantar,gritar,llorar,saltar. No se detenga por hacerla feliz,no se cohíba,ni intente cohibirla de ser libre y disfrutar los instantes felices.
Escríbale verdades,no dulzuras, ámela sin hostigarla,sin aferrarse, porque sus alas son enormes y si se asfixia tiende a huir,esa es su manera.
Cuando tenga ganas de hacerle el amor,recorra cada espacio,pero empiece por el cerebro,no cometa la bestialidad de penetrar,agitar y ya. Recuéstese con ella y cuente las estrellas,por absurdo que resulte,solo es una genialidad.
Atrévase si puede.


No se enamore si es un cobarde,si no tiene agallas,si le queda grande pensar y dejar pensar. No se atreva si se aferra,si le gusta atar. Ni se le ocurra enamorarse si no puede volar,si le avergüenza sentir desde las cosas pequeñas.


Mejor ríndase si es de los que creen manejar el mundo por tener a dos o más mujeres.


Huya antes de que ella lo haga.






Si resulta siendo usted,muy agalludo y se enamora,sea usted mismo y déjese llevar que las consecuencias serán muy gratificantes.






-ANGIE CAROLINA ERASO JARAMILLO.